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  1. Pigmalión y Galatea II: La mano se refrena. La mano se refrena, 2ª serie, H.98.7 cm x ancho 76,3 cm (1878). En la segunda imagen, se revela la mujer perfecta de Pigmalión. Jugando a ser un dios, ha creado a la mujer y ahora retrocede para admirarla, sosteniendo el cincel frío contra su rostro como si tuviera miedo de tocar su creación nuevamente.

  2. Pigmalión es una figura de la mitología de Chipre. Aunque Pigmalión es la versión griega del nombre real fenicio Pumayyaton, es más familiar a partir de Las metamorfosis de Ovidio, obra en la que se presenta a Pigmalión como un escultor enamorado de una estatua que había hecho él mismo.

  3. Mito de Pigmalión y Galatea. Un día se propuso hacer la más hermosa escultura, la mejor de sus obras, una mujer ideal, esculpida en marfil blanco. Una mujer con una belleza inimaginable e inigualable. Se dedicó con esmero a realizar esta obra y de este modo paso días y noches encerrado en su taller dando forma a esta mujer.

  4. El pilono o pilón, palabra proveniente del griego πυλών pylṓn 'puerta grande', 'portal', 1 2 es una construcción con forma de pirámide truncada, a modo de gruesos muros, que, erigidos por pares, flanquean la entrada principal de los templos del Antiguo Egipto; en el espacio dejado entre ambos se encuentra la puerta de ...

  5. Resumen. Al día siguiente, ambos lingüistas se encuentran trabajando en la casa de Higgins cuando entra Mrs. Pearce para avisar que ha llegado una muchacha de modales vulgares y quiere ver a Higgins. Descubren que ella es la florista de la noche anterior.

  6. Pero, según cuenta Virgilio, advertida Elisa en un sueño, tras haberse cometido aquel atroz delito, pudo huir con sus tesoros y llegar a las costas libias, en donde fundó Cartago en el 814 a.C. Pumayyatón fue asesinado por su esposa Astarté.

  7. La leyenda de Pigmalión resuena a través de los tiempos, una fábula fascinante que ha cautivado el imaginario colectivo. Es la historia de un escultor tan talentoso que su propia creación superaba la realidad, y de una pasión tan intensa que trascendía la materia inanimada.