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  1. La magnífica Biblioteca pública de Kansas City. Una de las obras arquitectónicas más inusuales en Kansas City, es la fachada de la Biblioteca Central Pública. Esta pared fue diseñada para parecerse a una fila de libros gigantes alineados en un estante. Los lomos de los libros, que miden aproximadamente 7×3 metros, presentan 22 títulos ...

  2. La biblioteca pública de Kansas City (Missouri, Estados Unidos) ha sido considerada por muchos como la «más bonita del mundo», según Architecture Mag. Y es que cuenta con una fachada entera, de unos ocho metros de alto, formada por las portadas de algunos de los libros favoritos de sus usuarios.

  3. 27 de ene. de 2018 · Y es que este ya famoso frente de biblioteca se conoce desde su inauguración en 2006 como la “estantería de la comunidad” ya que la selección de libros se hizo teniendo en cuenta las opiniones de los usuarios. De este modo ahí se leen títulos de clásicos como Romeo y Julieta de Shakespeare o Historia de dos ciudades de Dickens.

  4. 6 de jun. de 2016 · Una de las fachadas de la Biblioteca Pública de Kansas City, en Missouri, fue pintada con el fin de dar la impresión de que está cubierta con una hilera de libros gigantes de casi 8 metros de altura. Por lo tanto, los transeúntes pueden admirar clásicos de la literatura internacional como Cien años de soledad de….

  5. 31 de mar. de 2014 · La Kansas City Public Library es un sistema público con sede en la Biblioteca Central, ubicada en la ciudad de Kansas, Missouri. Fundada en el año 1873, es el mas antiguo y el tercero mas extenso sistema de bibliotecas públicas en el área metropolitana de la ciudad de Kansas.

  6. Biblioteca de Kansas City, Estados Unidos. De la series “Los 16 Más Sorprendentes Edificios del Planeta”. Altura: 7 metros. Los turistas que planean visitar Kansas City no deben perderse el edificio de la biblioteca pública local.

  7. 17 de dic. de 2007 · Con esa premisa en mente se construyó la fachada del parking exterior de la Biblioteca Pública de Kansas City, que se decoró con los lomos (gigantes, por supuesto) de las encuadernación de aquellas obras literarias que los propios habitantes de la ciudad consideran más representativas de la misma, y con el propósito de que la gente la utilice con más frecuencia.