Yahoo Search Búsqueda en la Web

Resultado de búsqueda

  1. 11 de ago. de 2020 · Así que la descripción bíblica sobre el anticristo enseña que, más que una persona, el anticristo es un espíritu de herejía (4:3), un espíritu de apostasía que surge desde adentro de la Iglesia para engañar y apartar de la fe a muchos.

  2. Señales de la llegada del Anticristo: La Biblia menciona varias señales que indicarán la proximidad de la llegada del Anticristo. Algunas de estas señales incluyen falsos profetas, guerras y conflictos, desastres naturales y un aumento en la maldad y la persecución de los seguidores de Cristo.

  3. Estamos llamados a estar atentos para detectar los signos del anticristo y mantenernos firmes en nuestra fe. Algunas de las señales incluyen: Un desprecio manifiesto hacia Dios y el evangelio de Cristo.

  4. Un signo de Anticristo es encontrado en Daniel 8:8 y sigs., 23, y sigs., 11: 21-45, en la persona de Epifanio de Antioquia. Muchos comentadores han encontrado alusiones mas o menos claras al Anticristo en la venida de los falsos Cristos y falsos profetas (Mt.24:24; Mc.13:6,22; Lc. 21:8), en la "maldad de aflicción", y en aquel que "vendrá en ...

  5. 29 de ene. de 2024 · Las interpretaciones modernas del Anticristo varían mucho. Algunos cristianos todavía creen en la descripción bíblica del Anticristo como un individuo que llegará al poder, provocará el caos y provocará el fin del mundo. Otros creen que el Anticristo es más un símbolo de todo lo malo que una persona literal.

  6. La palabra anticristo puede significar un enemigo de Cristo o uno que usurpa el nombre de Cristo y sus derechos. La palabra se encuentra solamente en cuatro vv. de las Escrituras (1Jo 2:18, 1Jo 2:22; 1Jo 4:3; 2Jo 1:7), pero el concepto aparece a través de las Escrituras.

  7. 6 de oct. de 2022 · Así que la descripción bíblica sobre el anticristo enseña que, más que una persona, el anticristo es un espíritu de herejía (4:3), un espíritu de apostasía que surge desde adentro de la Iglesia para engañar y apartar de la fe a muchos. Por eso Juan advierte: