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Nina Nikoláyevna Berbérova (ruso Нина Николаевна Берберова; San Petersburgo, 26 de julio jul. / 8 de agosto de 1901 greg. - Filadelfia , Estados Unidos , 26 de septiembre de 1993) fue una escritora rusa famosa, entre otras cosas, por narrar la vida de los exiliados rusos en París .
Escritora rusa nacionalizada estadounidense, Nina Berbérova nació en la ciudad de San Petersburgo el 26 de julio de 1901. Hija de una familia burguesa, huyó de su país en 1922, poco después de la Revolución Rusa, con su compañero sentimental Vladislav Jodasiévich (un poeta de renombre fallecido 1939).
Nina Nikolayevna Berberova (Russian: Ни́на Никола́евна Бербе́рова; 26 July 1901 – 26 September 1993) was a Russian writer who chronicled the lives of anti-communist Russian refugees in Paris in her short stories and novels. She visited post-Soviet Russia.
La escritora Nina Nikoláyevna Berbérova, única descendiente del matrimonio compuesto por un funcionario armenio llamado Nikolái Ivánovich y una rusa ortodoxa que respondía al nombre de Nataliya Ivánovna, nació en San Petersburgo el 8 de agosto de 1901.. En la década del 20, esta mujer rusa que había soportado persecuciones durante su adolescencia se dirigió a Francia en compañía ...
14 de jul. de 2023 · Periodista, maestra, narradora, fue esencialmente una criatura arrasada por la nostalgia de un país cuyos perfiles apenas podía captar —más allá de la remembranza— en la existencia atormentada y melancólica de los emigrados rusos.
Nina Nikoláyevna Berbérova ( ruso Нина Николаевна Берберова; San Petersburgo, 26 de julio jul. / 8 de agosto de 1901 greg. - Filadelfia, Estados Unidos, 26 de septiembre de 1993) fue una escritora rusa famosa, entre otras cosas, por narrar la vida de los exiliados rusos en París.
Nina Berbérova, autora de El junco rebelde. Nina Berbérova nació en San Petersburgo en 1901. Hija de un funcionario armenio, vivió en San Petersburgo hasta que en 1922 abandonó Rusia con su marido, el poeta Vladislav Jodasévich, alegando que «la actividad literaria bajo el régimen bolchevique era imposible».
