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  1. www.actiludis.com › wp-content › uploadsEL PAÍS DE LA ALEGRÍA

    EL PAÍS DE LA ALEGRÍA (Cuentos para Ulises - de Juan Carlos Ortega - RNE) Había una vez un país muy lejano donde todos sus habitantes eran personas alegres. Por las soleadas calles y avenidas, los ciudadanos de todas las edades caminaban sonrientes y llenos de una tremenda ilu-sión. - ¡Qué contento estoy!.- ¡Pues anda que yo!

  2. 23 de feb. de 2019 · Que mejor forma de retratar a una sociedad que los ojos de una niña despierta y rebelde. Gran novela y gran autora, Nieves Álvarez. Prólogo de la novela Alicia en el país de la alegría. J.R Barat. Acabo de terminar la lectura de Alicia en el país de la alegría, la primera novela de la escritora Nieves Álvarez.

  3. La emocionante historia real de un sastre republicano que cambió la vida de su comunidad gracias a la música. «Impresionante, conmovedor y desgarrador.» De Telegraaf «Un narrador de aliento poderoso.» Antón Castro

  4. Alicia en el país de la alegría: 36 (Alquisa) Paperback – 15 febrero 2019. El relato de Nieves Álvarez se vertebra en torno a los recuerdos de una niña para quien la vida, a pesar de lo sórdido de la época en que transcurre su infancia, es un jardín lleno de luz y de misterios.

  5. Número de páginas: 566. D.L.: TO 674-2018. ISBN: 978-84-949652-3-4. Comentario: El relato de Nieves Álvarez se vertebra en torno a los recuerdos de una niña para quien la vida, a pesar de lo sórdido de la época en que transcurre su infancia, es un jardín lleno de luz y de misterios.

  6. En definitiva, Alicia en el país de la alegría es una novela con muchísimos méritos. Una novela a la altura de las que nos regalaron otras grandes escritoras sobre la misma temática (Carmen Martín Gaite, Ana María Matute, Almudena Grandes, Josefina Aldecoa, Carmen Laforet…).

  7. EL PAÍS DE LA ALEGRÍA Había una vez un país muy lejano donde todos sus habitantes eran personas alegres. Por las soleadas calles y avenidas, los ciudadanos de todas las edades caminaban sonrientes y llenos de una tremenda ilusión. - ¡Qué contento estoy!.- ¡Pues anda que yo! Y así era durante el día y durante la noche.