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Una niña vende fósforos en la víspera de Navidad y ve a sus seres queridos fallecidos en las llamas. Un cuento de Hans Christian Andersen adaptado por Ethan J. Connery con ilustración de Rose Art Studios.
En medio del frío y de la oscuridad, una pobre niña pasó por la calle con la cabeza y los pies desnudos. Tenía, en verdad, zapatos cuando salió de su casa; pero no le habían servido mucho tiempo. Eran unas zapatillas enormes que su madre ya había usado: tan grandes, que la niña las perdió al apresurarse a atravesar la calle para que no ...
¡Llévame contigo! ¡Cuando se apague el fósforo, sé muy bien que ya no te veré más! ¡Desaparecerás como la chimenea de hierro, como el ave asada y como el hermoso nacimiento! Después se atrevió a frotar el resto de la caja, porque quería conservar la ilusión de que veía a su abuelita, y los fósforos esparcieron una claridad vivísima.
La pequeña cerillera, La cerillera, La niña de los fósforos, La pequeña vendedora de fósforos o La Nochebuena de Anita (en danés: Den lille Pige med Svovlstikkerne) es un cuento de hadas del escritor y poeta danés Hans Christian Andersen, famoso por sus cuentos infantiles.
La pequeña vendedora de fósforos. Hans Christian Andersen nos cuenta la historia de una pequeña niña vendedora de fósforos que en medio de una fría noche de navidad encontró calor para su corazón. Cuento de Era Navidad en una ciudad de un lejano país.
Entonces tuvo miedo de quedarse sola, en medio de la oscuridad y del frío. Se apuró en encender todos los fósforos que le quedaban. Éstos estaban ardiendo vivamente cuando la pequeña vendedora de fósforos vio, en la brillante luz producida por las llamas, a su abuelita.
La vendedora de fósforos. Christian Andersen. La víspera de Año Nuevo todo el mundo transitaba con prisas sobre la nieve para refugiarse al calorcito de sus hogares. Sólo la pequeña vendedora de fósforos no tenía dónde ir, y pregonaba incansable su modesta mercancía.
