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37 Cuando llegaban ya cerca de la bajada del monte de los Olivos, toda la multitud de los discípulos, gozándose, comenzó a alabar a Dios a grandes voces por todas las maravillas que habían visto, 38 diciendo: ¡Bendito el rey que viene en el nombre del Señor; paz en el cielo, y gloria en las alturas! Read full chapter. Lucas 18.
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Lucas 19:37-38. Nueva Biblia de las Américas. 37 Cuando ya se acercaba, junto a la bajada del monte de los Olivos, toda la multitud de los discípulos, regocijándose, comenzó a alabar a Dios a gran voz por todas las maravillas[ a] que habían visto, 38 diciendo: «¡Bendito el Rey que viene en el nombre del Señor!
S. Lucas 19:37-38 Cuando llegaban ya cerca de la bajada del monte de los Olivos, toda la multitud de los discípulos, gozándose, comenzó a alabar a Dios a grandes voces por todas las maravillas que habían visto, diciend | Biblia Reina Valera 1960 (RVR1960) | Descarga La Biblia App ahora. S. Lucas 19:37-38 RVR1960. Compartir.
Lucas 19:37-38 NTV. Cuando llegó a donde comienza la bajada del monte de los Olivos, todos sus seguidores empezaron a gritar y a cantar mientras alababan a Dios por todos los milagros maravillosos que habían visto. «¡Bendiciones al Rey que viene en el nombre del SEÑOR! ¡Paz en el cielo y gloria en el cielo más alto!». NTV: Nueva Traducción Viviente
37 Cuando ya se acercaba, junto a la bajada del monte de los Olivosa, toda la multitud de los discípulos, regocijándose, comenzó a alabar a Diosb a gran voz por todas las maravillas1 que habían visto, 38 diciendo: ¡Benditoa el Rey que viene en el nombre del Señorb! ¡Paz en el cielo y gloria en las alturasc! Comparte. Mostrar notas al pie de página.
1 Habiendo entrado Jesús en Jericó, iba pasando por la ciudad. 2 Y sucedió que un varón llamado Zaqueo, que era jefe de los publicanos, y rico, 3 procuraba ver quién era Jesús; pero no podía a causa de la multitud, pues era pequeño de estatura. 4 Y corriendo delante, subió a un árbol sicómoro para verle; porque había de pasar por allí. 5 Cuando ...
La Biblia de las Américas. Cuando ya se acercaba, junto a la bajada del monte de los Olivos, toda la multitud de los discípulos, regocijándose, comenzó a alabar a Dios a gran voz por todas las maravillas que habían visto, Nueva Biblia Latinoamericana.
