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  1. El Espíritu Santo, el espíritu de Jesús, ese Espíritu que vino Él a traer al mundo, es el principio de nuestra santidad. La vida interior no es otra cosa que unión con el Espíritu Santo, obediencia a sus mociones. Estudiemos estas operaciones que realiza en nosotros.

  2. Juan 14:26 consolador Padre aprendizaje. ¿No saben que ustedes son templo de Dios y que el Espíritu de Dios habita en ustedes? 1 Corintios 3:16 santidad Espíritu iglesia. Se les aparecieron entonces unas lenguas como de fuego que se repartieron y se posaron sobre cada uno de ellos.

  3. El Espíritu tiene muchas funciones y actividades. Primero, Él obra en el corazón de toda la gente, en todas partes. Jesús les dijo a Sus discípulos que Él enviaría al Espíritu al mundo para “convencer al mundo de pecado, y de justicia, y de juicio” (Juan 16:7-11).

  4. En resumen, el Espíritu Santo es la presencia de Dios en nosotros que nos ayuda a mejorar y a crecer cada día, buscando ser más como Jesús. Disfrutemos del Espíritu Santo en nosotros y vivamos vidas que muestren su amor y su poder.

  5. 26 de sept. de 2018 · El Espíritu Santo en nosotros es más conveniente que tener a Jesús caminando entre nosotros. No hay relación más personal que el Dios de los cielos viviendo dentro de ti. El Espíritu Santo viviendo en nosotros es el sello de nuestra adopción y nuestra identidad como hijos de Dios.

  6. 22 de mar. de 2016 · 1. El Espíritu Santo es la tercera persona de la Trinidad. No es un poder ni una fuerza. La Escritura le atribuye una personalidad distintiva, al igual que al Padre y el Hijo ( Mt. 3:16-17; Jn.14:16-17 ). 2. El nuevo Testamento hace mención del Espíritu Santo constantemente: 56 veces en los evangelios. 57 veces en el libro de los Hechos.

  7. 3 de jun. de 2020 · 1. El Espíritu Santo abre los corazones de los escogidos de Dios para mostrarles la verdad de Jesús. “Él nos salvó, no por las obras de justicia que nosotros hubiéramos hecho, sino conforme a Su misericordia, por medio del lavamiento de la regeneración y la renovación por el Espíritu Santo” ( Tit. 3:5 ). 2.

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