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25 de abr. de 2024 · Según si son hojas simples o compuestas: cuando de cada pecíolo nace un limbo, la hoja es simple. Por el contrario, si de un solo pecíolo nacen varios limbos, es una hoja compuesta. Estas pueden ser binadas, ternadas, quinadas o digitadas, en función del número de foliolos, o pinnadas, si los foliolos salen todos de un solo eje.
Limbo o lámina: porción verde, aplanada, delgada, con dos caras: la adaxial, superior, ventral, haz o epifilo dirigida hacia el ápice, y la cara abaxial, inferior, dorsal, envés o hipofilo dirigida hacia la base del tallo.
La hoja es el órgano de la planta encargado de la fotosíntesis (en los casos en los que ésta presenta la estructura verde característica, más o menos extendida, plana y fina). Está formada generalmente por dos partes fundamentales: una lámina delgada, el limbo, y un estructura cilíndrica y alargada que se fija al tallo, el pecíolo.
Hoja simple: cuando el limbo está formado por una sola pieza, aunque presente divisiones más o menos profundas. Hoja compuesta: presentan el limbo dividido en partes o segmentos, llamados folíolos. A veces es difícil distinguir una hoja compuesta de una ramita con hojas simples.
En botánica se llama limbo foliar a la lámina que comúnmente forma parte de la anatomía de una hoja. La cara superior se llama haz (compárese con la palabra faz, que tiene la misma etimología) y la inferior envés.
En una hoja simple, la hoja es completamente indivisa (Figuras \(\PageIndex{8, 12, 13}\)) —o tiene lóbulos, pero la separación no llega a la nervadura central, como en la hoja de arce.
