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Al escuchar esto, Tom y Huck se sienten muy afortunados de no intentar buscar en la casa embrujada el viernes. Los dos hombres duermen un rato, y luego se despiertan y discuten sobre los $650 en plata que han escondido en la casa.
Las aventuras de Huckleberry Finn es una novela clásica escrita por Mark Twain. La historia comienza con una referencia al libro Las aventuras de Tom Sawyer, donde Huck explica cómo ganó su fortuna junto a Tom. Después de esto, Huck vive con la viuda Douglas, quien trata de civilizarlo.
Se muda a la casa de la viuda Douglas, donde sobrevive a tres semanas de vida adecuada antes de huir. Tom lo encuentra escondido en una barrica detrás del antiguo camal, y trata de llevarlo de regreso a la casa de la viuda. Huck dice: "'No hables de eso, Tom.
Según Huck, Jim le cuenta a todos los otros esclavos que unas brujas lo pasearon alrededor del mundo y que el diablo fue quien le dio el níquel. Tom y Huck se escabullen hacia el río y conocen a algunos de los otros chicos que se supone que son miembros de la banda de ladrones de Tom.
Huck explica cómo ganó su fortuna; él y Tom encontraron ladrones escondidos en una cueva. La juez Thatcher ahorró responsablemente su dinero en una cuenta y les proporcionó una asignación de un dólar por día. Huck vive con la viuda Douglas, una mujer que lo ha acogido y está tratando de civilizarlo. Huck es inquieto y solitario.
Aconteció que en Huck se había despertado un aprecio especial por las hermanas Wilks, y en esos días de estancia con la familia el padre de las mujeres falleció a Huck protegiéndolas del duque, escondió un saco de dinero en el féretro de Peter Wilks, aprovecho cuando Mary Jane, estaba en la habitación donde yacía el cuerpo del difunto.
Para cerrar la historia bien cerrada y que no queden cabos sueltos, al final descubrimos que el cadáver de la isla era el padre de Huck; además, éste todavía tiene todo el dinero que encontró al final de Tom Sawyer.
