Yahoo Search Búsqueda en la Web

Resultado de búsqueda

  1. Fue este el punto en que el pueblo declaró: “Su sangre sea sobre nosotros y sobre nuestros hijos” ( Mateo 27:24 -25). El relato termina con la declaración de que Pilato, entonces, “soltó a Barrabás, y habiendo azotado a Jesús, le entregó para ser crucificado” ( Mateo 27:26; Marcos 15:15; Lucas 23:24 -25).

  2. ¡Allá ustedes !». 25 Todo el pueblo contestó: «¡Caiga Su sangre sobre nosotros y sobre nuestros hijos!». 26 Entonces les soltó a Barrabás, y después de hacer azotar a Jesús, lo entregó para que fuera crucificado . Read full chapter

  3. COLECCIÓN: Literatura MATERIA: Ficción histórica PÁG: 144 TAMAÑO: 13 x 21 cm PUBLICACIÓN: Jun 2007 ISBN: 978-84-7490-873-2. ¿En qué librería lo puedo comprar? Dicen del libro. ‘Barrabás’ (Pär Lagerkvist) y la oscuridad de la cruz.

  4. 7 de feb. de 2010 · Sugel Michelén (MTS) es miembro del concilio de Coalición por el Evangelio. Ha sido por más 35 años uno de los pastores de Iglesia Bíblica del Señor Jesucristo, en República Dominicana, donde tiene la responsabilidad de predicar regularmente la Palabra de Dios. Es autor de varios libros, incluyendo De parte de Dios y delante de Dios y El ...

  5. Es un libro curioso y entretenido. Escrito por el Premio Nobel de Literatura del año 1.951, narra la historia de un condenado a muerte, que a punto de ser crucificado, le perdonaron la vida y pusieron en su lugar a Jesucristo, en medio de otros dos condenados a muerte.

  6. Y respondiendo todo el pueblo, dijo: Su sangre sea sobre nosotros, y sobre nuestros hijos. Entonces les soltó a Barrabás; y habiendo azotado a Jesús, le entregó para ser crucificado. Poncio Pilato sabía que el asunto se le había ido de las manos. La multitud estaba enardecida pidiendo la crucifixión del Señor Jesús.

  7. Resumen. Premio Nobel de Literatura 1951. 'Habla. ¿Crees en Él? Barrabás meneó negativamente la cabeza ¿No? Entonces ¿por qué llevas su nombre en la placa? Barrabás seguía mudo. ¿No es tu Dios? ¿Acaso no significa eso la inscripción? -Yo no tengo Dios -contestó Barrabás, en voz tan baja que apenas se le podía oír.