Resultado de búsqueda
Acuérdate de mí, Carlos Augusto Salaverry: Poema original en análisis. Lectura en audio con IA (en pruebas) ¡Oh! cuánto tiempo silenciosa el alma 1. mira en redor su soledad que aumenta 2. como un péndulo inmovil: ya no cuenta 3. las horas que se van! 4. No siente los minutos cadenciosos 5. a golpe igual del corazón que adora 6.
- Perú
Acuérdate de mí, de Carlos Augusto Salaverry ¡Cuántas veces...
- Perú
Carlos Augusto Salaverry >. Acuérdate de mí. +. -. ¡Oh! cuánto tiempo silenciosa el alma. mira en redor su soledad que aumenta. como un péndulo inmovil: ya no cuenta. las horas que se van! No siente los minutos cadenciosos.
POEMA ACUERDATE DE MI - Carlos Augusto Salaverry. Me gusta. ¡oh! Cuánto tiempo silenciosa el alma. Mira en redor su soledad que aumenta. Como un péndulo inmovil: ya no cuenta. Las horas que se van! No siente los minutos cadenciosos. A golpe igual del corazón que adora.
¡Acuérdate de mí! (1871) de Carlos Augusto Salaverry. Descargar como . ¡Oh! cuánto tiempo silenciosa el alma mira en redor su soledad que aumenta como un péndulo inmóvil: ya no cuenta las horas que se van! No siente los minutos cadenciosos a golpe igual del corazón que adora aspirando la magia embriagadora de tu amoroso afán.
Acuérdate de mí. ¡Oh! cuánto tiempo silenciosa el alma. mira en redor su soledad que aumenta. como un péndulo inmovil: ya no cuenta. las horas que se van! No siente los minutos cadenciosos. a golpe igual del corazón que adora. aspirando la magia embriagadora. de tu amoroso afán. Ya no late, ni siente, ni aún respira.
Acuerdate de mi: Poema de Carlos Augusto Salaverry en español para leer - Poemas clásicos. Poemas clásicos > Poemas de Amor > Acuerdate de mi. Acuerdate de mi de Carlos Augusto Salaverry. ¡oh! Cuánto tiempo silenciosa el alma. Mira en redor su soledad que aumenta. Como un péndulo inmovil: ya no cuenta. Las horas que se van!
Carlos Augusto Salaverry Acuérdate de mi "¡Oh! cuanto tiempo silenciosa el alma mira en redor su soledad que aumenta como un pendulo inmovil; ya no cuenta las horas que se van! No siente los minutos cadenciosos a golpe igual del corazón que adora esperando la magia embriagadora