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  1. Ciudad de Licaonia, que formaba una parte de la provincia romana de Galacia. Fue fundada en el año 6 antes de Cristo, y estaba habitada por veteranos romanos. Sus habitantes eran ciudadanos de Roma. Se halla a unos 1,6 km al noroeste de Kathyn Serai, que está a unos 37 km en línea recta hacia el sudsudoeste de lconio, la moderna Konya.

  2. Listra - Diccionario de Jerusalén. ciudad de Licaonia, asignada como colonia romana o a Pisidia o a Galacia. Pablo visitó la ciudad en su primer viaje y curó allí a un paralítico. Los habitantes de la ciudad se quedaron tan impresionados, que tomaron a Pablo y a Bernabé por dioses y querían ofrecerles sacrificios.

  3. La palabra "listra" tiene un significado muy interesante en la Biblia. En el contexto bíblico, la palabra "listra" se refiere a una ciudad antigua ubicada en la región de Licaonia, en lo que hoy es Turquía. Esta ciudad es mencionada en el libro de los Hechos de los Apóstoles, en el Nuevo Testamento.

  4. 22 de mar. de 2019 · Listra (Lugares en la Biblia) 2Timoteo, Hechos. Listra era una ciudad en lo que hoy es el centro-sur de Turquía. Fue entonces en Galacia. Curando a un hombre cojo en Listra. Puede que no haya muchos judíos en Listra, porque cuando llegaron Pablo y Bernabé, escuchamos más sobre su ministerio a los gentiles. Cuando Pablo sanó a un ...

  5. Listra significado bíblico. Definición. El significado bíblico de Listra, es una ciudad de Licaonia o colonia ubicada en Roma. Se comenta que su fundación se llevó a cabo de la mano de Augusto. Por su parte, podemos observar lo siguiente en Hechos 14:13.

  6. Pablo es apedreado en Listra. 8 Y cierto hombre de Listra estaba sentado, imposibilitado de los pies, cojo de nacimiento, que jamás había andado. 9 Este oyó hablar a Pablo, el cual, fijando en él sus ojos, y viendo que tenía fe para ser sanado, 10 dijo a gran voz: Levántate derecho sobre tus pies.

  7. 8 En Listra vivía un hombre lisiado de nacimiento que no podía mover las piernas y nunca había caminado. Estaba sentado, 9 escuchando a Pablo, quien al fijarse en él y ver que tenía fe para ser sanado, 10 le ordenó con voz fuerte: —¡Ponte en pie y enderézate!