Yahoo Search Búsqueda en la Web

Resultado de búsqueda

  1. La cita de James Gandolfini, "La fe en uno mismo puede mover montañas", nos recuerda la importancia de creer en nuestras propias capacidades y potencialidades. A menudo, nos encontramos con desafíos y obstáculos que parecen invencibles, como montañas imponentes en nuestro camino.

  2. Frases de “Los Soprano” 14 citas. “No creas nada de lo que oigas y ni la mitad de lo que veas.”. “La fábula del toro y su hijo. Un toro y su hijo, el novillo, observaban desde una colina cómo pastaban un grupo de vacas. El novillo preguntó al padre: ¡ Papá, papá!

  3. Quotes. James Gandolfini. I'm a neurotic mess. I'm really basically just like a 260-pound Woody Allen. I'm an actor... I do a job and I go home. Why are you interested in me? You don't ask a truck driver about his job. I was voted best-looking kid in high school but, as you can see, things changed. I used to say I was a 260-pound Woody Allen.

  4. James John Gandolfini, Jr. (Westwood, Nueva Jersey; 18 de septiembre de 1961–Roma, Italia; 19 de junio de 2013) [1] fue un actor estadounidense, conocido principalmente por su papel de Tony Soprano en la serie Los Soprano de la cadena HBO, un jefe de la mafia que lucha por equilibrar su vida familiar y su carrera criminal.

  5. Frases de “El último Boy Scout” 10 citas. “- Quiero verte gritar. - Pues entonces ponme un rap.”. “- Arriba o abajo. - Vamos Joe, somos amigos desde hace tiempo. - Sí, hasta que empezaste a tirarte a mi mujer. Arriba o abajo.”. “El agua moja, el cielo es azul y las mujeres tienen secretos .”.

  6. 18 de sept. de 2021 · Su rostro será por siempre el de Tony Soprano, un mafioso en toda regla que se llevó hasta tres premios Emy pero, en realidad, era James Gandolfini, que nació en nació en Westwood, Nueva Jersey, el 18 de septiembre de 1961.

  7. 12 de mar. de 2022 · Un actor enamorado del teatro aunque condenado a encarnar matones y brutos de importancia secundaria en la gran pantalla, debido a su físico tosco y a su voz nasal, atributos que según los estándares de no hace tantos años —como digo, alrededor de veinte— se antojaban incompatibles con el protagonismo.