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Hace 1 día · Sylvia Plath’s best poetic work was squeezed out of her restless soul in the last weeks of her life. Renowned as the poet of death, she inspired tons of readers and writers. Sylvia was born under a sky revealing The Grim Reaper’s seductive grin. Both benefics, Venus and Jupiter, reside in the 8th house of death.
Hace 2 días · La depresión se apoderó de la poeta, de tal manera que se quitó la vida con una sobredosis el mismo día de su cumpleaños, en 1930. Otras poetas importantes que terminaron sus días suicidándose son la chilena Teresa Wilms Montt, Sylvia Plath, la argentina Alejandra Pizarnik o la mexicana Antonieta Rivas Mercado.
Hace 13 horas · Explorar la esencia de la feminidad es un viaje de autoconocimiento y aceptación, donde se valora la feminidad en todas sus manifestaciones, ya sea en la delicadeza de un gesto o en la fuerza de una decisión. La esencia de la feminidad también está intrínsecamente ligada a la conexión con la naturaleza y con otros seres humanos.
Hace 2 días · Its author was Sylvia Plath. Judith was able to work with Plath and Child as she saw fit, with very little oversight from Knopf ’s higher-ups. Knopf had had their eye on Plath since 1953, when she’d done a stint as a guest editor at Mademoiselle during her summer break from Smith College (whence Julia Child had graduated two decades before).
Hace 2 días · La Chica que quería ser Dios es una creación colectiva sobre la vida y obra de Sylvia Plath. La Chica que quería ser Dios es una creación colectiva sobre la vida y obra de Sylvia Plath. Inicio Música Artes y Letras Gastrobar Turismo Cultura Cannábica Tendencias Eventos Subir evento.
Hace 5 días · Sylvia Plath April 2000 Issue Pamela Norris Who Is Sylvia? The Journals of Sylvia Plath, 1950–1962 By Karen V Kukil (ed) LR October 2018 Issue Sally Bayley Plath’s Passions The Letters of Sylvia Plath, Volume II: 1956–1963 By Peter K Steinberg & Karen V Kukil (edd)
Hace 23 horas · Jones pushed to publish Sylvia Plath’s first collection, “The Colossus,” though unaccountably turned down “The Bell Jar.” (Ironically, she envied Plath’s seemingly cozy domestic life.)
