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30 de may. de 2019 · Si el estudioso de los temas políticos habrá de tropezar a cada momento con la importancia de la Iglesia católica en Occidente, es menester indagar de dónde viene y cómo consolidó su poder ...
La Iglesia Medieval y El Feudalismo: INTRODUCCIÓN: Una de las características principales de estos tiempos es el gran poder que tiene la Iglesia. Desde la caída del Imperio Romano, quedó como el único centro unificador en Europa y se consideró asimisma como la heredera directa de Roma. Pero no le fue sencillo llegar a hacer efectivo ese ...
Durante el Renacimiento, la Iglesia Católica mantuvo su influencia y poder en la sociedad europea, aunque comenzó a enfrentar desafíos y críticas cada vez mayores. A pesar de esto, la Iglesia seguía siendo una fuerza dominante en la vida de las personas y continuaba ejerciendo control sobre la educación, la cultura y el arte.
En la Edad Media, se produjeron importantes cambios políticos que transformaron el panorama de poder y gobernabilidad en Europa. Estos cambios fueron impulsados por una serie de factores, como la descentralización del poder feudal, la consolidación del poder monárquico, la influencia de la Iglesia en la política, los conflictos y guerras, el surgimiento de nuevas formas de gobierno y la ...
30 de ene. de 2013 · No obstante, la compensación más destacada desde el poder civil vino con la entrega de lo que puede calificarse de “llave de las aulas”, pues la educación es un lugar privilegiado para perpetuar su influencia social y moral o su capital simbólico. Este libro determina la evolución del poder de la Iglesia católica española desde sus ...
Resumen. El presente trabajo centra la atención en la estructura actual de la Iglesia Católica en México, mediante la cual se ubica, históricamente, a ésta como un poder "fáctico" en el ámbito sociopolítico. Ciertamente este acercamiento a la Iglesia no es idéntico, ni tiene la misma naturaleza que tiene una institución política ...
EL PODER DE LA IGLESIA 325 cientes que algunos de ellos son bien explícitos por sí mismos, en tanto que otros tie· nen una significación clara en la medida en que son leídos en la tradición de lo Igle- sia (d. DV. 9). Nuestra lectura, que no puede sino ser católica, supone, pues, la com-
