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  1. ' Cioran y Éditions Gallimard, 1993 Obra publicada con el concurso de la Comisión Europea ' de la traducción: Joaquín Garrigós, 1998 Diseæo de la colección: Clotet-Tusquets Diseæo de la cubierta: BM Reservados todos los derechos de esta edición para Tusquets Editores, S.A. Œ Cesare Cantœ, 8 Œ 08023 Barcelona ISBN: 84-8310-564-0

  2. Ellos no saben que el paraíso y el infierno son floraciones de un instante, del instante mismo, que no hay nada más allá de la fuerza de un éxtasis inútil. En su camino de mortales, no he encontrado la parada eterna sobre la bóveda de los instantes. Veo un árbol, una sonrisa, un orto, un recuerdo.

  3. Emil Michel Cioran – Çürümenin Kitabı. Deneme, Felsefe. Aslında her fikir yansızdır, ya da öyle olmalıdır; ama insan onu canlandırır, alevlerini ve cinnetlerini yansıtır ona; saflığını yitirmiş, inanca dönüştürülmüş fikir, zaman içindeki yerini alır, bir olay çehresine bürünür; Mantıktan sara hastalığına ...

  4. OPERA LUI CIORAN SCRIERI ÎN LIMBA ... CIORAN, EMIL Despre neajunsul de a te fi nãscut / Emil Cioran; trad.: Florin Sicoie. – Bucureºti: Humanitas, 2011 ISBN 978-973-50-2934-0 I. Sicoie, Florin (trad.) 821.135.1-84 821.133.1-84=135.1 EDITURA HUMANITAS Piaþa Presei Libere 1, 013701 Bucureºti, România

  5. 18 de feb. de 2022 · Emil Cioran (1911-1995), hijo de un pope de la iglesia ortodoxa, nació en Rasinari. Cursó estudios secundarios en Sibiu y después estudió filosofía en Bucarest. Se licenció en 1932 con un trabajo sobre Bergson. Durante el año 1933, escribió su primer libro, En las cimas de la desesperación, publicado al año siguiente en Rumania. En […]

  6. Cioran_Emil_Pe_culmile_disperarii_1990.pdf ‎ (file size: 13.62 MB, MIME type: application/pdf) Emil Cioran, Pe culmile disperării [On the Heights of Despair], Bucharest: Editura "Fundaţia pentru Literatură şi Artă", 1934; reprint, Bucharest: Humanitas, 1990.

  7. See Full PDFDownload PDF. E. M. CIORAN ESE MALDITO YO (Aveux et anathèmes - 1987) Al margen de la existencia Cuando el Cristo descendió a los infiernos, los justos de la antigua ley, Abel, Enoch, Noé, desconfiaron de su enseñanza y no respondieron a su llamada. Creyeron que era un emisario del Tentador, cuyas trampas temían.