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Martes Santo. Jesús sufre traición y penas de todo tipo, pero sabe que es necesario pasar por ahí, para salvarnos. Por: Padre Llucià Pou Sabaté | Fuente: Catholic.net. 1ª: Is 49,1-6 (también se lee el Domingo 2º-A): ¡Escúchenme, costas lejanas, presten atención, pueblos remotos!
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La Pasión de Jesús. El martes acude al Templo por el camino...
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Martes Santo. INVITATORIO. V. Señor, abre mis labios. R. Y...
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Martes santo. Acompañar a Jesús con nuestra contrición y la...
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El Martes Santo nos llama a reflexionar sobre nuestras...
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La Pasión de Jesús. El martes acude al Templo por el camino tantas veces recorrido. Por: P. Enrique Cases | Fuente: Catholic.net. El día de las grandes controversias. La noche del lunes fue como la del domingo: enseñanzas a los discípulos y mucha oración. Jesús está en máxima tensión.
Martes Santo. INVITATORIO. V. Señor, abre mis labios. R. Y mi boca proclamará tu alabanza. Ant A Cristo, el Señor, que por nosotros fue tentado y por nosotros murió, venid, adorémosle. Salmo 94. Venid, aclamemos al Señor, demos vítores a la Roca que nos salva; entremos a su presencia dándole gracias, aclamándolo con cantos.
El Martes Santo, Martes de la Controversia, es un día especial en el camino espiritual que va trazando la Semana Santa. En él intensificamos nuestra preparación para vivir el Triduo Pascual.
Hoy, Martes Santo, la liturgia pone el acento sobre el drama que está a punto de desencadenarse y que concluirá con la crucifixión del Viernes Santo. «En cuanto tomó Judas el bocado, salió. Era de noche» (Jn 13,30).
Martes santo. Acompañar a Jesús con nuestra contrición y la búsqueda de la conversión.
El Martes Santo nos llama a reflexionar sobre nuestras propias traiciones, pequeñas o grandes, y sobre cómo estas afectan nuestra relación con nosotros mismos, con los demás y con lo divino. En la penumbra de la traición de Judas, encontramos un espejo de nuestras propias sombras.