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  1. 5 de feb. de 2022 · Josué 24: Por mi parte, mi familia y yo serviremos al Señor. Josué reunió a todas las tribus de Israel en Siquén. Allí convocó a todos los jefes, líderes, jueces y oficiales del pueblo. Todos se reunieron en presencia de Dios. ¿Qué opinas de lo que hizo Josué?

  2. El que ama al padre o a la madre más que a , no es digno de mí; y el que ama al hijo o a la hija más que a mí, no es digno de mí. Puesto que en obediencia a la verdad habéis purificado vuestras almas para un amor sincero de hermanos, amaos unos a otros entrañablemente, de corazón puro.

  3. Por mi parte, mi familia y yo serviremos al Señor. Josué 24:15 ídolos seguir servir. Queridos hermanos, ahora somos hijos de Dios, pero todavía no se ha manifestado lo que habremos de ser. Sabemos, sin embargo, que cuando Cristo venga seremos semejantes a él, porque lo veremos tal como él es.

  4. Dios es experto en restaurar relaciones y en sanar lo que parece dañado. Su deseo es que cada familia sobre la tierra le conozca, sea transformada por su amor y lleve su presencia a todos los que la rodean. Siempre damos gracias a Dios por todos ustedes cuando los mencionamos en nuestras oraciones.

  5. www.coalicionporelevangelio.org › articulo › la-familia-dios-se-reconoce-amorLa familia de Dios se reconoce por su amor

    28 de mar. de 2018 · Ese es el que debe gobernar la familia de Dios. Él dice en Juan 13:34-35: “Un mandamiento nuevo les doy: ‘que se amen los unos a los otros; que como Yo los he amado, así también se amen los unos a los otros. En esto conocerán todos que son Mis discípulos, si se tienen amor los unos a los otros’”.

  6. 18 de jun. de 2023 · Adoramos a Dios como familia cuando nos amamos, nos respetamos, nos apoyamos el uno al otro en tiempos difíciles, en la enfermedad, como en los problemas que enfrentamos, en la confusión que nos presenta la vida, en el infortunio y más aún en la pérdida de un ser amado.

  7. 2 de jul. de 2012 · Quiera el Señor ayudarnos este año, para buscar en lo individual la presencia de Dios, pero también como familias. Que nadie se sienta solo, porque aún si no tuviere una, o teniéndola como si no la tuviere, hay una gran familia en la cual Dios nos ha colocado, es la familia de Dios.