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do hacer una caperucita roja y le sentaba tanto que todos la llamaban Caperucita Roja. Un día su madre, habiendo cocinado unas tortas, le dijo: —Anda a ver cómo está tu abuela, pues me dicen que ha estado enferma; llévale una torta y este tarrito de mantequilla. Caperucita Roja partió en seguida a ver a su abuela que vivía en otro pueblo.
Lee la clásica historia de Caperucita Roja y su abuelita, que fue devorada por un lobo en el bosque. Descarga el archivo PDF completo y disfruta de este cuento de hadas clásico.
11 | CAPERUCITA ROJA Caperucita Roja abrió grandes sus ojos y vio cómo los rayos del sol atravesaban las ramas de los árboles y acariciaban las preciosas flores que crecían por todas partes. Deslumbrada, pensó: “Si llevo a la abuela un ramo de flores frescas se alegrará. Es temprano, llegaré a tiempo”.
Descarga el libro de Caperucita Roja, una de las cuentas de hadas más famosas de Charles Perrault. Lee cómo el lobo se comió a la niña y a su abuela, y la moraleja que se extrae de la historia.
Caperucita Roja. Caperucita Roja. Charles Perrault. Había una vez una niñita en un pueblo, la más bonit a que jamás se hubiera visto; su madre estaba enloquecida con ella y su abuela mucho más todavía. Esta buena mujer le había mandado hacer una caperucita roja y le sentaba tanto que todos la llamaban Caperucita Roja.
Un día su madre le dijo: “Ven, Caperucita Roja, aquí tengo un pastel y una botella de vino, llévaselas en esta canasta a tu abuelita que esta enfermita y débil y esto le ayudará. Vete ahora temprano, antes de que caliente el día, y en el camino, camina tranquila y con cuidado, no te apartes de la ruta, no vayas a caerte y se quiebre la ...
Caperucita tuvo un poco de miedo cuando escuchó la voz ronca de la abuela, pero pensó que tenía la nariz atascada del resfriado, y contestó: —Soy yo, Caperucita. —dijo la niña— Traigo bizcocho y mantequilla para que te pongas bien. —Entra —dijo el lobo— tira de la manilla y abre la puerta. El lobo al ver entrar a Caperucita, se ...