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Vigilancia activa. En la vigilancia epidemiológica activa el personal a cargo de la vigilancia busca activamente información sobre la enfermedad que es objeto de investigación. Se contacta al personal médico, se visitan los centros de atención sanitaria y se analizan los registros de salud en busca de indicios de la enfermedad.
La vigilancia activa es una estrategia clave utilizada en diferentes entornos para monitorear y detectar cambios, riesgos o tendencias emergentes. A través de la recolección sistemática de datos y su posterior análisis, permite obtener información actualizada y relevante que puede ser utilizada para la toma de decisiones informadas.
La vigilancia epidemiológica al ser una herramienta importante dentro de Salud Pública, cumple distintas funciones que van a favor y busca del bienestar humano a través de la prevención de enfermedades; de esta forma entre los múltiples beneficios que trae la vigilancia epidemiológica de una población se tiene:
Los enfoques de farmacovigilancia activa tienen como objetivo incorporar información complementaria de seguridad. La utilización de metodologías de farmacovigilancia activa puede ser recomendable en algunos escenarios, como, por ejemplo: Autorización de nuevos medicamentos a partir de pocos ensayos clínicos o de pequeño tamaño.
RESUMEN. Fundamento: la vigilancia epidemiológica contribuye a diseñar estrategias para impedir la propagación de enfermedades y por otro planificar recursos que conlleven a elevar el estado de salud de la población. Esta ha sido y es una preocupación de directivos, estados y países.
La vigilancia epidemiológica es uno de los instrumentos de la Salud Pública con mayor aplicación en el mundo para registrar sistemáticamente la ocurrencia de enfermedades y sus determinantes en un área geográfica determinada, con la finalidad de conocer su frecuencia y sus tendencias, así como para llevar acciones sanitarias para su ...
La vigilancia activa y la espera vigilante son enfoques de "esperar y ver" para el cáncer. Se utilizan porque es posible que usted mejore (o no empeore) sin tratamiento. Y si el cáncer continúa creciendo o propagándose, usted y su médico decidirán lo que hacer a continuación.
