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Los que están volviendo son los amiguitos del Club Tesoros del Rey. Doña Beatriz, Sal, Pimienta, Pepita, Estrella, Samuel, y las mascotas Dina y Dino. Vamos a empezar con una serie sobre la armadura de Dios. Presentaremos un personaje bíblico para cada una de las partes de la armadura.
Saúl pertenecía a una de las familias más pequeñas del pueblo de Israel (1 Samuel 9:21). Sin embargo, Dios puso sus ojos en él, y le dio la responsabilidad de ser el primer rey. Cuando Dios elige a un hombre (o a una mujer) para llevar a cabo su obra, no se fija en el rango social de la persona, ni en su situación económica.
El pueblo proclama rey a Saúl ¡Saúl se había escondido entre el equipaje! Seguramente eran unas maletas y bolsas muy grandes, pues Saúl era el más alto en todo Israel; nadie le llegaba al hombro. Cuando al fin encontraron a Saúl, Samuel dijo: «Vean qué hermoso es el rey que Dios ha elegido. No hay otro igual en todo Israel». «¡Viva ...
Saúl fue el primer rey de Israel, un líder elegido por Dios para gobernar a su pueblo en un momento en que el pueblo clamaba por un líder fuerte y carismático. Su historia está registrada en el Antiguo Testamento de la Biblia, específicamente en los libros de Samuel. En esta entrada. Antecedentes.
20 de dic. de 2018 · Ante el Rey de reyes somos como Mefi-boset, que se consideró «un perro muerto». Pero por su gran misericordia Cristo nos invita a «comer» a la mesa con Él. «¿Ha quedado alguno de la casa de Saúl, a quien haga yo misericordia por amor de Jonatán?»
El rey Asuero, al verse desquiciado por la reina Vasti, cuando ésta se negó a venir al banquete que él celebraba para sus funcionarios y servidores, se enfureció y ordenó que ella nunca vuelva a presentarse ante él, y que se le quite el título de reina.
15 de jul. de 2022 · Era hijo de Cis y pertenecía a la tribu de Benjamín. Saúl fue elegido como rey cuando los israelitas pidieron una monarquía. Saúl se convirtió en rey luego de ser ungido por Samuel, para enfrentarse a los filisteos y los amalecitas. Saúl reinó sobre Israel cuarenta y dos años (1 Samuel 13:1).
