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1. **El canto de las sirenas**: Las sirenas son criaturas mitológicas que atraen a los marineros con su hermoso canto para luego devorarlos. Ulises, consciente de esto, ordenó a su tripulación taparse los oídos con cera y atarse a él mismo al mástil de su barco, para así resistir la tentación y no caer en la trampa mortal. 2.
12 de sept. de 2023 · Episodio de Ulises y las sirenas en un fresco romano. 50-75 d.C. Museo Británico, Londres. La noche caía sobre el palacio de Alcínoo, rey del legendario país de los feacios. En el atrio y el patio de la gran mansión del soberano, los habitantes de la isla se habían reunido en torno a Demódoco, un prestigioso aedo al que la Musa había ...
Ulises, un héroe griego que regresaba a casa después de la guerra de Troya, se enfrentó al peligro de las sirenas en su viaje. Temeroso de caer bajo el embrujo de su canto mágico, Ulises ordenó a sus marineros que lo ataran fuertemente al mástil del barco para poder escucharlas sin riesgo de ser atraído hacia ellas. Gracias a este ingenioso truco, Ulises pudo continuar su viaje a salvo ...
Ulises y las sirenas son tres obras pictóricas, que pueden referirse a: Ulises y las sirenas, cuadro de Herbert James Draper. Ulises y las sirenas, cuadro de John William Waterhouse. Ulises y las sirenas, mosaico romano de la Casa de Dionisos y Ulises, Dougga (Túnez).
Ulises y las sirenas que le llamaban con su canto. Los hombres hicieron lo que Ulises les pedía: le ataron con muchas vueltas de una fuerte cuerda al palo del mástil y ellos se taparon los oídos con cera. El barco se fue acercando a la isla de las sirenas y sus cantos comenzaron a llegar nítidos hasta los oídos de Ulises.
Canto 12: Las sirenas Escila y Caribdis. La isla del sol. Ogigia. Este canto narra cómo Odiseo y sus hombres logran escapar de las voces de las sirenas gracias a la ayuda de Circe. Por otro lado, cuando llegan a la isla del sol, los compañeros de viaje de Ulises no hacen caso a los consejos de Circe e ingieren vacas prohibidas del ganado de ...
En la Odisea de Homero, Ulises y su tripulación se encuentran con las sirenas en su viaje de regreso a Ítaca. Para proteger a sus hombres de su irresistible canto, Ulises ordenó que todos se taparan los oídos con cera, mientras él permanecía atado al mástil de su barco para poder escuchar su melodía sin ser seducido.
