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Se destacó como predicador y su dedicación a la pastoral de jóvenes y estudiantes. La redacción del cuarto Mandamiento revela una profunda sabiduría cristiana. No dice: «Ama a tu padre y a tu madre», sino «honra». Has de ser, por tanto, un padre digno, que merezcas ser honrado por tu hijo, y que pueda éste ponerte por modelo.
Y al que me ama, mi Padre lo amará, y yo también lo amaré y me manifestaré a él. (Juan 14:21) Lucas 11:28. Dichosos más bien —contestó Jesús— los que oyen la palabra de Dios y la obedecen. (Lucas 11:28) 2 Juan 1:6. En esto consiste el amor: en que pongamos en práctica sus mandamientos. Y este es el mandamiento: que vivan en este ...
HONRA A TU PADRE Y A tu MADRE (que es el primer mandamiento con promesa), Efesios 6:3 PARA QUE TE VAYA BIEN, Y PARA QUE TENGAS LARGA VIDA SOBRE LA TIERRA. Colosenses 3:20 Hijos, sed obedientes a vuestros padres en todo, porque esto es agradable al Señor. Éxodo 20:12 Honra a tu padre y a tu madre, para que tus días sean prolongados en la ...
Por supuesto que sí, pero la honra va más allá de la simple obediencia. La obediencia requiere una orden previa, un comando. Recibimos la orden y, si somos obedientes, ejecutamos o hacemos algo. Pero la honra no requiere mando. La honra no necesita una orden. Como hijo, honro a mis padres haciendo lo que me ordenaron y también lo que no me ...
Eclesiastés 12:13. La conclusión, cuando todo se ha oído, es esta: teme a Dios y guarda sus mandamientos, porque esto concierne a toda persona. ¶ El fin de todo el sermón es oído: Teme a Dios, y guarda sus mandamientos; porque esto es toda la felicidad del hombre. El discurso ha terminado. Ya todo ha sido dicho.
honra a tu padre y a tu madre. y los padres el papel de los hijos. y no hay quien comprenda. y eso es una tristeza infinita. porque te denuncian sin clemencia. la insolencia y la falta de respeto. y ya no hay derecho. pues todo en la vida, de vuelta se recibe. nadie la obedece, nadie la obedece ya.
14 de dic. de 2017 · Por eso, hay que entender correctamente el cuarto mandamiento, y no absolutizarlo a favor de intereses que no son los de Dios. La clave no es otra que esta: honra padre y madre quien obedece a Dios; honra padre y madre quien ama a Dios sobre todas las cosas. ©HM Revista; nº198 Septiembre-Octubre 2017
