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Reina-Valera 1960. 12 Honra a tu padre y a tu madre, para que tus días se alarguen en la tierra que Jehová tu Dios te da. Read full chapter. Éxodo 20:12 in all Spanish translations. Éxodo 19.
23 de feb. de 2024 · En la Biblia, honrar a padre y madre es uno de los mandamientos dados por Dios. En Éxodo 20:12 se menciona: «Honra a tu padre y a tu madre, para que tus días se alarguen en la tierra que Jehová tu Dios te da». Esto significa que la recompensa de honrar a padre y madre es una vida prolongada y abundante. Es un principio clave en las ...
8 de sept. de 2021 · Esto significa ayudar a tu padre y a tu madre a tener una vida digna en su vejez (1 Timoteo 5:4). Cuando crecemos, nuestros padres con el pasar del tiempo empiezan a perder la vitalidad que los caracterizó cuando éramos pequeños, es justamente en esos años, donde debemos empezar a cuidarlos y protegerlos.
Efesios 6:1-3. 6 Hijos, obedezcan a sus padres en el Señor, porque esto es justo. 2 Honra a tu padre y a tu madre (que es el primer mandamiento con promesa), 3 para que te vaya bien, y para que tengas larga vida sobre la tierra. »Honra a tu padre y a tu madre, para que tus días sean prolongados en la tierra que el SEñOR tu Dios te da.
Lo que algunos creen: Los hijos que honran a sus padres dejan que ellos controlen su matrimonio. La verdad: La Biblia enseña que la unión entre el esposo y la esposa tiene prioridad sobre las demás relaciones familiares. Génesis 2:24 dice: “El hombre dejará a su padre y a su madre, y tiene que adherirse a su esposa” ( Mateo 19:4, 5 ).
Versículos Más Relevantes. Honra a tu padre y a tu madre, para que tus días sean prolongados en la tierra que el SEÑOR tu Dios te da. ``Cada uno de vosotros ha de reverenciar a su madre y a su padre. Y guardaréis mis días de reposo; yo soy el SEÑOR vuestro Dios. ``Honra a tu padre y a tu madre, como el SEÑOR tu Dios te ha mandado, para ...
Autor: P. Antonio Rivero LC. Capítulo 6: Cuarto: Horrarás a tu padre y a tu madre. Comenzamos ahora los mandamientos relacionados con el prójimo. Los tres primeros se referían a la relación con Dios. Los siete restantes, al prójimo. ¡Qué desprendido es nuestro Dios que sólo quiere para sí tres mandamientos!
