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  1. La ciencia demostró que Ricardo III no era el jorobado que describió Shakespeare En 2012, más de cuatro siglos después, gracias a la exhaustiva investigación llevada a cabo por Philippa Langley (una historia representada en la película de Netflix The Lost King ) los restos del único rey inglés que no había sido enterrado junto a sus ancestros se encontraron en el suelo de un ...

  2. Unos días después, el laboratorio forense certifica que el cráneo encontrado fue atravesado por un objeto punzante y que la curvatura de la columna parecía confirmar la joroba de Ricardo III (1452-1485), rey de Inglaterra durante el último año y medio de su tormentosa vida. De confirmarse la sospecha, se trataba de un hallazgo sensacional ...

  3. Hacer un esfuerzo por comprender la biografía de Ricardo III el Jorobado, el motivo por el cual Ricardo III el Jorobado vivió del modo en que lo hizo y actuó de la forma en que lo hizo durante su vida, es algo que nos ayudará por un lado a comprender mejor el alma del ser humano, y por el otro, la manera en que avanza, de forma implacable ...

  4. 30 de may. de 2014 · Londres - May 30, 2014 - 09:50 EDT. Ricardo III no cojeaba y, lejos de ese físico deformado por la joroba que han venido replicando en escena los más ilustres actores shakesperianos, en realidad ...

  5. Para los realizadores de la película The lost King [ El rey perdido ], que se estrena en España el próximo 5 de mayo, es una receta mágica. Y lo cierto es que, aunque cueste creer, esta historia, que sigue el descubrimiento en 2012 de los restos del rey Ricardo III de Inglaterra en un aparcamiento de Leicester, está basada en hechos reales.

  6. 30 de may. de 2014 · Actualizado a las 14:29h. Ricardo III padecía escoliosis, pero no era el monarca impedido y deformado que William Shakespeare describió en su drama, según refleja el análisis de los restos del ...

  7. 31 de may. de 2014 · Pero el bardo parece que erró el tiro, dijeron los científicos esta semana. Su exhaustivo análisis de los restos del rey, incluyendo una reconstrucción en 3-D de su columna, confirmaron que Ricardo III no era realmente un jorobado sino que sufría de escoliosis, una curvatura lateral de la columna vertebral.