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  1. Alfred E. W. Mason, ‘Las cuatro plumas’. Edhasa, Barcelona, 2004. Traducción de Miguel Antón. 384 pp. [tags]Las cuatro plumas, A. E. W. Mason[/tags] Ayuda a mantener Hislibris comprando «Las cuatro plumas» en La Casa del Libro. Esta entrada fue enviada el jueves, 22 d+02:00 mayo d+02:00 2008 a las 13:00 y está archivada bajo Novela ...

  2. Las cuatro plumas, una novela de aventuras de 1902 escrita por A. E. W. Mason; Las cuatro plumas, una película de 1921 dirigida por René Plaissetty; Las cuatro plumas, una película de 1929 dirigida por Merian C. Cooper, Lothar Mendes y Ernest B. Schoedsack; Las cuatro plumas, una película de 1939 dirigida por Zoltan Korda;

  3. Es posible alquilar "Las cuatro plumas" en Rakuten TV, Google Play Movies, Amazon Video online y comprarlo como descarga en Amazon Video, Rakuten TV, Google Play Movies. Sinopsis Harry Feversham es admirado por sus compañeros y está considerado como uno de los mejores soldados de su regimiento.

  4. Su obra más conocida, y por la que llegó a alcanzar la fama, es, sin duda, Las cuatro plumas (1902), aunque también consiguió renombre gracias a sus cinco libros sobre el inspector francés Hanaud (escritos entre 1910 y 1946), clara influencia en las series posteriores de Agatha Christie.

  5. Adaptada en cuatro ocasiones para el cine, Las cuatro plumas es uno de los clásicos más notables de la novela de aventuras, ... Su obra más conocida, y por la que llegó a alcanzar la fama, es, si nduda, Las cuatro plumas (1902), aunque también consiguió renombre gracias a sus cinco libros sobre el inspector francés Hanaud ...

  6. Adaptada en cuatro ocasiones para el cine, Las cuatro plumas es uno de los clásicos más notables de la novela de aventuras, una obra maestra sobre los valores eternos de la amistad y el más delicioso romanticismo. No en balde, la novela está construida sobre una verdad que no podemos olvidar, pues, a veces la vida otorga la más inesperada ...

  7. Harry Faversham, uno de los soldados británicos de más impecable reputación, no puede menos que sentirse consternado al recibir, a finales de 1882, cuatro plumas blancas (ofensivo e inequívoco símbolo de cobardía), por haber decidido no acompañar a su regimiento en una arriesgada campaña en Sudán, para permanecer en Londres junto a su prometida.

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